Colocar un microchip a una mascota es darles una forma permanente y única de identificación. Es ideal para viajar al extranjero y cumplir con la reglamentación específica de ingreso de animales dependiendo el país.
Muchos países están haciendo que la identificación electrónica de mascotas sea mandatoria. De hecho, colocar un microchip se considera la forma más confiable y eficiente de identificación ya que los microchips son permanentes, irrepetibles y no pueden ser falsificados o retirados.